mardi 16 août 2011

Gran Cantata en Caracas, por la Libertad y Asilo del cantor del pueblo colombiano Julián Conrado



Mañana miércoles 17 de agosto, tendremos, en la Plaza Bolívar de Caracas, la Gran Cantata por la Libertad y Asilo del cantor del pueblo colombiano Julián Conrado.
CONVOCATORIA
Mañana miércoles 17 de agosto, tendremos, en la Plaza Bolívar de Caracas, la Gran Cantata por la Libertad y Asilo del cantor del pueblo colombiano Julián Conrado.
La Coordinadora “QUE NO CALLE EL CANTOR”,convoca para dar parte y recado al Libertador Simón Bolívar de la detención ilegal e injusta de un hijo suyo, que está preso en la Carraca del DIM, en su Caracas natal y libertaria; para la juramentación de los cultores militantes por la solidaridad, libertad y derecho de asilo y/o refugio del cantautor Julián Conrado, así como de cualquier otro revolucionario que corra el peligro de ser entregado a los enemigos del pueblo; y para lacelebración del nacimiento del cantor de pueblo colombiano, el 17 de agosto de 1954.
Fecha: miércoles 17 de agosto de 2011
LugarPlaza Bolívar de Caracas.
Hora: 11 am.
Participantes:
·            Bendición y palabras de la Hermana Eugenia Russián Solé, vocera de la Mesa de Opinión y Legal de La Fundación Latinoamericana por los Derechos Humanos y el Desarrollo Social - FUNDALATIN.
·            Conjuntamente con otros militantes de la esperanza y por la vida, Trabajadores de la Cultura y del Arte, José Alejandro Delgado, La Chiche Manaure, Sandino Primera, Alí Manaure, Amaranta Pérez, Centauro Saher, Poeta Eli Briceño, Grupo Sur Da La Mano, Poeta José Leonardo Riera, Colectivo de Poetas "Los Fulanos Esos", José Garcés, Guillermo Palacios, Poeta Dagil Ochoa; por ahora..., y confirmanda movilización de cultores de Vargas, Aragua, Zulia, Falcón, Caracas y más trabajadores culturales  y artistas por la digna solidaridad bolivariana.
Moderación: Tamanaco de la Torre, vocero de la Mesa de Opinión y Legal de la Coordinadora “QUE NO CALLE EL CANTOR”.

Contexto:
·                Julián Conrado formó parte del movimiento unitario de izquierdas Unión Patriótica que, a inicios de los años 80, perdió 5000 militantes en una “guerra selectiva”, asesinados por el fascismo colombiano. Luego de esto pasa a la ilegalidad para dar continuidad a su lucha y espacio a su voz y canto en las montañas colombianas.
Juramento de los Cultores Populares en la Plaza Bolívar de Caracas
El miércoles 17 de agosto, a los 57 años del nacimiento de Julián Conrado, combatiente cantautor preso del pueblo colombiano, y a los 70 años del nacimiento de nuestro Alí Primera, Grancolombianos ambos por la insurrección libertaria de Nuestra América, acudimos a la Plaza Bolívar de Caracas, como miembros de la Coordinadora “QUE NO CALLE EL CANTOR”, para celebrar el cumpleaños del compatriota de las riberas del Magdalena Julián, donde comenzó la Campaña Admirable para nuestra primera independencia, para dar parte  y recado, y jurar ante el Padre de la patria el Libertador Simón Bolívar, por la libertad de los presos políticos y el derecho al asilo y/o refugio:
Juramos ante ti, padre Libertador Simón Bolívar; ante los poderes creadores del pueblos libertarios; juramos por ellos; juramos por dignidad y honor, y juramos por la patria, que no daremos descanso a nuestros brazos ni reposo a nuestras almas, hasta que cerremos definitivamente las puertas en tierras bolivarianas al “Plan Colombia" y enterremos para siempre el “Plan Cóndor”, logremos la libertad y asilo de Julián Conrado, cantor del pueblo colombiano,  así como de cualquier otro revolucionario que corra el peligro de ser entregado a los enemigos del pueblo,    en la lucha incansable “contra el imperialismo donde quiera que este”, así como frente a sus oligarquías lacayas.
Antecedentes históricos de nuestro Juramento:
“El 15 de agosto de 1805, en compañía de Simón Rodríguez y Fernando Toro, Bolívar asciende a la histórica colina romana del Monte Sacro y allí, en el solemne templo de la naturaleza, el futuro Libertador, de apenas 22 años de edad, jura por la libertad de Venezuela.
La exaltación acumulada durante los días anteriores en el corazón de Simón Bolívar y la angustia que le produjo el recuerdo de su país natal explotaron con dignidad y decisión. Con los ojos encendidos como dos llamas, se puso en pie, se aferró con frenesí a las manos de su maestro Simón Rodríguez, cayó de rodillas y dio rienda suelta a sus pensamientos con una emoción incontenible.
Tenía entonces 22 años. Y no sólo fue por el fragor de la juventud, lo que hizo hacer este juramento, sino porque así lo sentía. Estaba inspirado en medio de las alturas de la Roma milenaria.”

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